20 de Junio de 2013. La Plataforma de Toledo en Defensa del Tajo ha elegido, el arroyo Aserradero como marco para su última rueda de prensa y no ha sido por casualidad. De este arroyo partió la última gota que colmó el vaso, que supuso el año pasado la mortandad de miles de peces y que se vendió como único y verdadero mal del Tajo, cuando en realidad hay dos gotas mucho mayores que matan al río desde hace decenas de años: la contaminación continuada y en aumento del desarrollismo industrial y urbano de Madrid desde los años 60 y la detracción de caudales naturales y de calidad trasvasados desde 1978 a otras cuencas.
Por: Plataforma de Toledo en Defensa del Tajo
Cada gota de agua,
contaminada o limpia, natural o modificada, contribuye al buen o mal estado de
las aguas del Tajo. También las que circulan por el arroyo Aserradero; arroyo
intermitente, ni siquiera estacional, cuyo lecho fue zanjado hace años para
contener un colector que llevaría las aguas negras de las urbanizaciones del
sur de Bargas y Olías del Rey a desembocar en el alcantarillado de Toledo,
según acuerdo de esos mismos Ayuntamientos, de la Diputación de Toledo y el
beneplácito de la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT). Las sucesivas
obras y chapuzas acometidas con decenas de miles de euros, cada vez, no han
impedido que las lluvias terminaran por remover el lecho arenoso del arroyo y
acabara por abrir el colector y colmatarlo de arena sucesivamente,
convirtiéndose el arroyo en una nueva y espesa atarjea a cielo abierto hasta
desembocar en el río Tajo, junto a la presa de Safont. La Plataforma lo
denunció ante los medios y las cámaras en 2009.
A menudo, exigimos limpieza y
depuración desde Madrid por cuanto supone para el río y para el patrimonio
histórico y cultural de Toledo, pero también manifestamos la misma exigencia
para las administraciones toledanas, como también exigimos de la CHT el mismo
celo en sancionar los vertidos de Madrid como lo hace con Toledo. Exigimos
también responsabilidades a la CHT como corresponsable de los vertidos en el
Aserradero. No en vano es la institución que tiene todas las competencias sobre
el dominio público hidráulico y debe garantizar la buena ejecución de las obras
autorizadas, así como su supervisión.
Respecto a las gotas detraídas
del curso natural del Tajo, denunciamos la connivencia de las administraciones
central y autonómica con los intereses privativos defendidos por las
comunidades del levante, centradas en mantener la agonía del Tajo con el
pretexto de su contribución al PIB nacional. Es un acto de traición y
colonialismo hídrico que no sólo termina con la vida del río más largo de la
península sino que condena a todos sus pueblos ribereños a privarse del
desarrollo natural, patrimonial, histórico y cultural que les es propio.
De tal latrocinio es
responsable el mismo gobierno de la nación en la persona de su ministro del
Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) cuando
conspira contra el río Tajo junto a los voraces e insaciables intereses del
levante en lugar de atemperarlos.
Y algo que nos alarma. Los
responsables de Murcia y Valencia, mientras celebran el 35 aniversario de
expolio al Tajo y a sus ribereños, se jactan de estar negociando con el
ministerio y con Castilla-La Mancha para llegar a un acuerdo, en base al
memorándum que los tres primeros han firmado para garantizar la pervivencia del
trasvase en el tiempo. Y eso se lo cuentan a sus ciudadanos del levante,
mientras que la presidenta Cospedal y su gobierno desprecian a los suyos y les
ocultan cualquier información sobre el Tajo.
Por lo tanto, exigimos a
Cospedal que dé la cara y explique públicamente qué está negociando y en nombre
de qué intereses está actuando, a espaldas de los ribereños del Tajo que,
precisamente, dejaron claro el 20 de junio de 2009 su oposición al trasvase en
aquella multitudinaria manifestación en Talavera de la Reina a la que ella no asistió.
Sirva esta cita de homenaje al espíritu que inspiró aquella convocatoria.
Hoy estamos
bajo las mismas circunstancias de hace un año (caudal mínimo, sin corriente,
verdoso, burbujeante y altas temperaturas) cuando la Fiscalía, que abrió
diligencias previas por la mortandad de peces, concluyó que no se produjo un
vertido concreto que la produjese sino que se debió a la "deficiente
calidad del agua y escaso caudal del río que provocaron el crecimiento masivo
de algas y la consiguiente disminución del nivel de oxígeno del agua".
Mucho nos tememos que se vuelva a reproducir la pelea que se registró
entre las diversas administraciones achacándose mutuamente la responsabilidad
de la mortandad de los peces. Los ciudadanos ya están hartos de políticos
que se tiran de los pelos para esconder su inoperancia, su incompetencia y la
falta de sentido de servicio público.
Llegado el caso exigiremos que la Fiscalía depure sus conclusiones a fin
de que el río Tajo deje de ser artificial y legalmente un río de aguas excedentarias,
término aplicado exclusivamente al río Tajo, el río más maltratado de toda
Europa occidental.
Por: Plataforma de Toledo en Defensa del Tajo
Toledo, cuenca del Tajo, a 20 de junio de 2013